Ensayos sobre una memoria de papel
Obra de teatro de objetos y nuevos medios.
Fotos - Magalí Lopez
SINOPSIS
Ensayos sobre una memoria de papel cuenta fragmentos de la vida de dos mujeres reales, ambas nacidas en el año 1933. A través del juego de las actrices, investigando sus cartas, un diario íntimo, sus papeles y objetos, aparece el cruce entre aquellas vidas pasadas y su impacto en nuestra actualidad.
FICHA ARTÍSTICA
Autoría:
Sofi Brandoni, Camila Fernandez, Lucila Grossi
Actúan:
Camila Fernandez, Lucila Grossi
Vestuario:
Sofi Brandoni, Martín Guccione
Escenografía:
Sofi Brandoni, Martín Guccione
Iluminación:
Francisco Boglich
Comunicación:
La Nilda Impulso Creativo
Asistencia de dirección:
Juliana Musicco
Dirección general:
Sofi Brandoni
Fotos - Magalí Lopez
RESEÑA POR ALEJANDRA BARRIOS- tEATRICA SUR
@teatrica.sur
A la mirada de Norma y Clyde
Previo al ingreso del público a la sala, el ensayo ya comienza con las actrices en escena dispuestas a adentrarse a un pasado familiar. En el espacio escénico las cartas desparramadas por el piso anuncian la necesidad de organizar recuerdos ajenos que las atraviesa con una fragilidad poética.
Desde el inicio, las reglas del juego teatral quedan planteadas, a modo de ensayo abierto, Camila y Lucila interpretan a dos “abuelas, madres y esposas” del siglo pasado visibilizando un discurso sobre la construcción de un ideal de mujer. Ellas interpelan al público constantemente con preguntas que tal vez esas mujeres ya se habían hecho y que en este tiempo estas nietas intentan responder. Frente a las dudas, enojos e incomodidades, surgen elipsis y cortes en la narración que hacen un relato no lineal, para ir reconstruyéndose desde una nueva lectura de esas biografías hacia nuevos sentidos públicos con perspectiva feminista.
La autorreferencialidad a la representación teatral, por un lado, subraya la noción de historia como una construcción desde un punto de vista enmarcado en una cosmovisión que es posible de ser releído y revisado; por otro lado, la teatralidad permite imaginar relatos desde un nuevo orden.
Las actrices sondean sobre la identidad de Norma y Clyde que se actualizan en sus cuerpas, objetos y por supuesto en la comida. Así, las intérpretes, se van reconociendo en situaciones pero en otras verifican que el orden social del siglo pasado también las atraviesa.
Como en el cine, el tópico de la mujer frente al espejo que reflexiona acerca de su ser y el deber ser, en esta puesta en escena se halla mediante el recurso de las proyecciones sobre las cuerpas generando un desdoblamiento entre las mujeres que narran y las que son narradas. La homologación de las jóvenes actrices con esas abuelas también supone una oposición, pues, un siglo después, las aspiraciones del mundo femenino van más allá del ámbito doméstico y privado.
La puesta en escena oscila entre situaciones de dulzura y dureza con situaciones cómicas muy bien logradas y, bajo la mirada de dos barbies que simbólicamente acusan con todo el peso del modelo de mujer impuesto por el orden patriarcal y hegemónico. Norma y Clyde también representadas en esas muñecas inmóviles, son testigos de la reconstrucción de sus vidas a través de las cuerpas de nietas.